Municipalidad de San Javier por Caso de Cuentas Corrientes: “Nos encontraron cuestiones administrativas, no existe delito”
La Contraloría emitió un informe para las municipalidades de San Carlos, en la región de Ñuble y San Javier, en el Maule, por detectar irregularidades en el proceso de licitación de asesorías económicas en el marco del denominado Caso Cuentas Corrientes.
La información será enviada al Ministerio Público y al Consejo de Defensa del Estado
Desde el municipio de San Javier hablaron al respecto, explicando que, el 2016 la Contraloría estableció que podían contratar a una empresa externa de asesoría para poder licitar las cuentas corrientes. En octubre de 2023, terminaron el contrato con Global SPA, cuando se sabe de las primeras irregularidades.
Según detalla la asesora jurídico Paula Troncoso, “fue la propia contraloría en 2016 que establece que nosotros podíamos como municipio contratar a una empresa externa de asesoría para poder licitar las cuentas corrientes. En octubre de 2023, nosotros pusimos término al contrato de Global SPA (cuando se sabe de las primeras irregularidades) hasta esa fecha nosotros como municipio estábamos tranquilos, de que las cosas las estábamos haciendo bien”.
La abogada enfatiza en los beneficios que generó la contratación de los servicios y asesoría de esa empresa: “El municipio de San Javier recibía 20 millones de pesos y a través de la licitación que nosotros hicimos con el banco Santander, con el banco Chile, el banco del Estado nosotros obtenemos prácticamente 150 millones de pesos anuales” expresa Troncoso.
“Una cosa es contratar a Global SPA para que nos hiciera un estudio de mercado y a través de ese estudio de mercado que es una situación muy compleja, que contraloría nos permitía realizar una segunda licitación que es con los bancos, para obtener un mayor interés y un mayor beneficio para nuestros recursos”, agrega la abogada.
“En definitiva lo que la contraloría observa es que nosotros, los pagos que realizamos a Global SPA, estuvieron mal realizados, que no deberíamos haberle pagado en cuotas, sino que en monto único y definido. ¿Y por que pagábamos en cuotas? en definitiva porque la plata no salía del municipio, salía de los propios intereses que ganábamos con el banco que ganara la licitación.
La contraloría no observa actos de corrupción, no observa conflictos de interés, solo es la forma errada en que se paga a la empresa”.